Conversión de motocicletas de gasolina a eléctricas en Corea del Sur

Corea del Sur Eyes Conversiones de motos de gas a electricidad

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Corea del Sur está considerando una iniciativa para convertir motocicletas de gasolina a eléctricas, en un esfuerzo por reducir la contaminación del aire y el ruido en sus ciudades. Esta investigación, que durará ocho meses, busca evaluar la viabilidad de modernizar la flota existente de motocicletas, esencial para la economía de entregas del país. A pesar de que las motocicletas son fundamentales en la logística urbana, también son responsables de altas emisiones contaminantes. Un pequeño motocicleta de gasolina puede emitir hasta 23 veces más monóxido de carbono que un coche pequeño, lo que resalta la necesidad de buscar alternativas más limpias.

Para apoyar esta transición, Seúl ha implementado estaciones de intercambio rápido de baterías, reutilizando antiguas cabinas telefónicas. Sin embargo, el cambio a motocicletas eléctricas ha sido más lento de lo esperado, con solo el 28.5% del objetivo de 29,000 motocicletas eléctricas alcanzado en 2023. Los obstáculos incluyen el rango limitado de las motocicletas eléctricas (70 a 80 km por carga), altos costos en comparación con las convencionales y una infraestructura de carga insuficiente.

La contaminación acústica también es un problema creciente, con un aumento del 79% en las quejas relacionadas con el ruido de motocicletas. En este contexto, la modernización de las motocicletas existentes se presenta como una solución más práctica.

Corea del Sur está observando el éxito de Indonesia, que ha implementado subsidios para conversiones de motocicletas, incrementando significativamente el número de conversiones. Esto sugiere que el apoyo financiero, junto con opciones de modernización, puede generar un impulso real. Los resultados del estudio ayudarán a determinar si esta estrategia puede implementarse a gran escala, ofreciendo a los propietarios de motocicletas una opción más asequible y contribuyendo a los objetivos ambientales del país. Si se logra, Corea del Sur podría convertirse en un ejemplo a seguir por otras naciones que buscan modernizar sus sistemas de transporte de dos ruedas.

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