Aventura en motocicleta: de Marruecos a Dakar

La primera vez a Dakar en motocicletas ... con 77 carreteras

Este texto me hizo pensar.

Un apasionante relato de un viaje en motocicleta hacia Dakar, donde la autora y su compañero se embarcan en una aventura inesperada. Todo comienza con la decisión de viajar a Dakar tras una conversación casual, solo necesitan un par de semanas de preparación, una visa para Mauritania y un contenedor para regresar con sus motos. La travesía incluye un viaje en ferry desde Génova a Tánger, donde comienzan su recorrido por Marruecos, disfrutando de la rica cultura y gastronomía de lugares como Asilah y El Jadida, donde hacen paradas para disfrutar del té de menta y ostras frescas. A medida que avanzan hacia el sur, el paisaje cambia a un desierto de tonos ocres y un mar siempre presente, y se aventuran por la costa, admirando el Archi di Leghzira y la belleza de la península de Dakhla.

En su camino, deciden desviarse hacia Tarfaya para explorar un pequeño museo dedicado a Antoine de Saint-Exupéry, y después de una noche en un complejo turístico, continúan su viaje. El trayecto se vuelve monótono con cientos de kilómetros de carretera recta, pero la expectativa de llegar a Dakar los mantiene motivados. Sin embargo, enfrentan varios desafíos en la frontera con Mauritania, donde deben superar controles tediosos y registros del ejército. A pesar del ambiente hostil, logran atravesar la frontera y disfrutar de la exuberancia de Senegal, donde la naturaleza vibrante y la cultura local les envuelven.

Después de disfrutar de la comida local y perderse en los mercados artesanales, llegan a Dakar, donde cargan sus motos en un contenedor para regresar a casa. La experiencia de atravesar Marruecos y Mauritania hasta llegar a Dakar es inolvidable y llena de aventuras, calor y humedad, pero valiosa en cada paso del camino. Este viaje no solo es un testimonio de la pasión por las motos, sino también de la conexión con la cultura y la gente de África occidental, que lo convierte en una experiencia que la autora atesorará para siempre.

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